El 29 de diciembre de 2021 se publicó la Ley Orgánica 11/2021 de lucha contra el dopaje en el deporte, o mejor conocida como nueva Ley Antidopaje. Es una Ley concebida para luchar contra el dopaje desde premisas y contextos internacionales. Ha sido una Ley aprobada con un consenso sin precedente en materia de lucha contra el dopaje, sin embargo, no ha estado exenta de polémica.
Contexto en el que entra en vigor la Ley Antidopaje.
La nueva Ley Antidopaje recibió un consenso sin precedente, quizá por la premura que era necesaria para adaptarse a las exigencias Internacionales. Para la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), la lucha contra el dopaje seguía siendo una tarea pendiente en España, que no había adecuado su legislación a las recomendaciones internacionales. De hecho, esta discrepancia entre las recomendaciones internacionales y el marco jurídico español ha sido una crítica constante.
En el año 1992 España se integró en el Convenio del Consejo de Europa contra el dopaje. En 2005 firmó la Convención contra el dopaje en el deporte de la Unesco. Posteriormente llegaron las leyes orgánicas de 2008 y 2013, siendo esta reformada en 2017. Ahora, con esta nueva Ley de 2021, es la primera ocasión en la que se adecua a tiempo la normativa a la última versión del Código de la Agencia Mundial Antidopaje. El motivo por el que la entrada en vigor se precipitó fue la advertencia que recibió España por parte de la AMA en septiembre. La Agencia advirtió que si no adaptaba su legislación a la normativa internacional sería declarado país no cumplidor del Código Antidopaje. En octubre, el anteproyecto de Ley fue aprobado y dos meses más tardes la Ley ya estaba publicada y puesta en vigor.
Cambios que introduce la Ley Antidopaje.
Aunque la norma entró en vigor en diciembre de 2021, este es un repaso de las novedades que viene a introducir.
- Nueva Clasificación de deportistas objeto de la Ley. Se introduce una distinción de los deportistas en función del nivel al que practiquen su deporte. Nivel Internacional, Nivel Nacional y Nivel Aficionado.
- Introducción de nuevos regímenes sancionadores. En función del nivel en el que se produzca la infracción, se aplicará un régimen sancionador u otro.
- Introducción de nuevos tipos de infracciones dirigidas a proteger a las personas que colaboran en la represión del dopaje. Además, se introduce también la reducción de las sanciones en casos de dopaje en los que se demuestre que se debe a productos contaminados.
- Nuevo órgano sancionador. A estos efectos, los procedimientos de sanción serán resueltos por el nuevo Comité Sancionador Antidopaje. Este Comité estará formado por profesionales relacionados con el mundo del derecho, el deporte, la ciencia y la medicina. El órgano emitirá sanciones inmediatamente ejecutivas, por lo que ponen fin a la vía administrativa y mantienen la jurisdicción contencioso-administrativa.
- Incorporación de la figura de las «Personas Protegidas». Este colectivo en el que se incluyen menores y personas con la capacidad de obrar alterada, recibirá una protección cualificada.
- La AEPSAD cede las competencias de deporte y salud al Consejo Superior de Deportes (CSD). Esta cesión de competencias conlleva un cambio de nombre de la entidad que pasa a denominarse Agencia Estatal, Comisión Española para la Lucha Antidopaje en el Deporte.
Qué opina la comunidad sobre la Ley Antidopaje.
El Director de la CELAD, José Luis Terreros, afirma que la nueva normativa era necesaria y que:
“Es muy importante que las federaciones deportivas y todos los actores del mundo del deporte conozcan las novedades de la nueva Ley de Lucha contra el Dopaje en el Deporte, aprobada por unanimidad en el Congreso de los Diputados y en el Senado. Una ley que hace que la normativa española en la materia sea más justa, proporcionada, independiente y sensible a las nuevas realidades de la lucha antidopaje”
Por su parte, Agustín González, el secretario general de la CELAD, opina en la misma línea que el Director. Según sostiene, las aportaciones del Consejo de Estado, los ministerios y el parlamento deslucieron el texto inicial que en su opinión era extraordinario y afirma:
«La ley del 2013 se quedaba a medio camino en muchas de las cosas, incluso en la estructuración de las sanciones y de las infracciones». En cambio, cree que la nueva «es el cimiento para tener una legislación estable en materia de dopaje y en las siguientes actualizaciones tan solo será necesario cambiar unas tejas por otras».
Sin embargo, no todos son halagos y hay voces que apuntan a las deficiencias que presenta la Ley.
Positivos que no llevan sanción aparejada.
La falta de desarrollo reglamentario en materia de pasaporte biológico es el causante de esta anomalía que enturbia el supuesto éxito.
El pasaporte biológico nació como una medida de control periódico a deportistas para evitar el dopaje. La lucha contra el dopaje se estaba complicando cada vez más y con la introducción del pasaporte biológico se facilitó la labor de seguimiento y control. Sin embargo, con el caso del ciclista Ibai salas, el pasaporte se suspendió. Recordemos que tras dar un resultado adverso, fue multado y suspendido y recurrió ante el TAD. El TAD ganó el recurso y la Agencia Mundial Antidopaje elevó el caso al contencioso-administrativo, que volvió a dar la razón al ciclista. Ahora, es la Audiencia Nacional la que está pendiente de pronunciarse y mientras tanto el pasaporte biológico está en suspenso.
Este pasaporte lo contempla la nueva Ley Orgánica, y sin embargo, esta situación sigue suponiendo un coladero de posibles «tramposos». Voces como Arturo Casado, campeón de Europa de 1.500 m se sorprenden de que un juez español tumbe la normativa internacional antidopaje. Por otro lado, expertos médicos y deportivos alzan la voz y creen que el sistema español está perjudicando al deporte y que la nueva Ley Antidopaje no viene a solucionar un problema que es para muchos prioritario en materia de lucha antidopaje.
#Dopaje | El atletismo español alza la voz contra la ausencia de Pasaporte Biológico en España a unas semanas de los Juegos Olímpicos y en plena explosión de marcas y récords históricos. pic.twitter.com/XoS9klxFT7
— Alberto Yelmo (@alyelmo) July 13, 2021
Conclusiones
La nueva Ley Antidopaje, como toda nueva Ley tiene sus luces y sombras. La intención es buena y en gran medida es un éxito por la agilidad con la que se redactó y aprobó y por el objetivo que persigue. Pero de intenciones no se vive, y por muy buena que sea la intención, una anomalía tan grave como la problemática del pasaporte biológico en una norma recién estrenada, apunta a que quizás ha pasado factura esa agilidad. Había prisa y la han vestido rápido, pero está por ver si España está en el camino correcto en materia de lucha antidopaje. Como bien apunta Alberto Yelmo, el ciclo preolímpico París 2024 será una buena primera práctica para ver qué sucede.